De vegades llegeixo notícies que em sorprenen moltíssim -suposo que per desconeixement- com aquesta que vaig llegir ara fa uns dies.
Hi ha estudis biològics que demostren que la meitat de les espècies que viuen a la terra, ja siguin animals o vegetals, no es poden classificar com a mascle o com a femella, bé perquè són hermafrodites -com la majoria de les plantes- o bé perquè al llarg de la seva vida comencen sent mascles i acaben sent femelles o viceversa -com passa amb els cargols, les estrelles de mars i molts peixos-. Fins aquí res a dir.
Ara bé, resulta que aquest mateix any, països com Austràlia i Alemanya han reconegut el gènere neutre. I què vol dir això?. Doncs vol dir que deixen oberta la possibilitat de què un ciutadà no s´hagi de registrar com a dona o com a home sinó que pot deixar buida la casella corresponent al sexe. I això perquè, que no estava prou clar que un esser humà havia de ser home o dona?. Doncs resulta que aquest model binari s´està començant a qüestionar perquè hi ha molts casos de nadons que neixen amb característiques fisiològiques d´ambdós sexes, de manera que els casos d´hermafroditisme, androgínia o d´individus
intersexuals no es poden considerar, en cap cas, casos aïllats -l´estadística assenyala un cas per cada 250 persones o el que és el mateix, tens les mateixes possibilitats de coincidir amb un intersexual que amb un pèl-roig-. Penseu també que a EEUU es realitzen diàriament 5 operacions quirúrgiques d´assignació de sexe en nadons.
Fins ara, el nounat s´havia d´inscriure com a nen o com a nena en el registre i el més habitual era que fos l´equip mèdic qui decidia quin seria el sexe definitiu del nadó, prioritzant els òrgans sexuals més desenvolupats o visibles i extirpant els de mida menor. Però aquesta decisió no sempre era l´encertada perquè el fet d´intervenir un nadó al cap de pocs dies de néixer, posa en perill la seva salut i hi ha el risc de danyar els seus genitals i disminuir la seva sensibilitat. I no només això. Moltes persones intersexuals podien quedar atrapades en un gènere que després, en fer-se grans, no sentien com a seu.
Per tots aquests motius, han començat a aparèixer organitzacions en defensa dels drets dels intersexuals com ara la OII (Organització Internacional d´Intersexuals) o la ISNA
(Intersex Society of North America). Aquests organismes reivindiquen que en cap cas sigui un metge qui decideixi la identitat sexual que ha de tenir un nadó intersexual: defenen que sigui el mateix individu qui decideixi en quin gènere es vol classificar i si vol o no, sotmetre´s a la cirurgia.
Però mentre aquest nadó intersexual es fa prou gran per decidir per si mateix, com se l´ha d´educar, com a home o com a dona?. La ISNA és partidària de donar sempre un gènere al nadó, independentment de la seva genitalitat, i permetre que es pugui modificar el gènere més endavant quan el nen tingui edat per decidir. Opinen doncs, que és millor classificar-lo, ja sigui com a dona o com a home, perquè si es registra com a “neutre” sempre serà considerat rar o estrany. Per decidir el gènere amb el qual es classificarà el nadó, la ISNA recomana basar-se en tests hormonals i genètics, a més de tenir en compte l´opinió del metge que, per la seva experiència, pot tenir més facilitat per "encertar" amb quin dels dos sexes es pot sentir més còmode el nadó.
Així que tenint en compte totes aquestes dades, és molt més que provable que en els pròxims anys molts països imitin la iniciativa d´Alemanya o Austràlia pel que fa a la classificació de gènere i contemplin la possibilitat d´un tercer sexe, mentre l´individu intersexual es defineix- bé, si governa el PP, evidentment això no passarà, però això és una altra història que avui no toca-.
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A veces leo noticias que me sorprenden muchísimo - supongo que por desconocimiento -como esta que leí hace unos días.
Hay estudios biológicos que demuestran que la mitad de las especies que habitan la tierra, ya sean animales o vegetales, no se pueden clasificar como macho o como hembra, bien porque son hermafroditas -como la mayoría de las plantas- o bien porque a lo largo de su vida empiezan siendo machos y acaban siendo hembras o viceversa -como ocurre con los caracoles, las estrellas de mar y muchos peces - . Hasta aquí nada que decir.
Ahora bien, resulta que este mismo año, países como Australia y Alemania han reconocido el género neutro. Y esto qué quiere decir?. Pues significa que dejan abierta la posibilidad de que un ciudadano no tenga que registrarse como mujer o como hombre sino que puede dejar vacía la casilla correspondiente al sexo. Y, os preguntaréis, porqué, que no estaba suficientemente claro que un ser humano tenía que ser hombre o mujer?. Pues resulta que este modelo binario se está empezando a cuestionar porque hay muchos casos de bebés que nacen con características fisiológicas de ambos sexos, de manera que los casos de hermafroditismo, androgínia o de individuos intersexuales no se pueden considerar casos aislados - la estadística señala un caso por cada 250 personas o lo que es lo mismo, tienes las mismas posibilidades de coincidir con un intersexual que con un pelirrojo-. Pensad también que en EEUU se realizan diariamente 5 operaciones quirúrgicas de asignación de sexo en bebés.
Hasta ahora, el recién nacido debía inscribirse como niño o como niña en el registro y lo más habitual era que fuese el equipo médico quien decidía cuál sería el sexo definitivo del bebé, priorizando los órganos sexuales más desarrollados o visibles y extirpando los de tamaño menor. Pero esta decisión no siempre era la acertada porque el hecho de intervenir a un bebé a los pocos días de nacer, pone en peligro su salud y existe el riesgo de dañar sus genitales y disminuir su sensibilidad. Y no sólo eso. Muchas personas intersexuales podían quedar atrapadas en un género que luego, al hacerse mayores, no sentían como suyo.
Por todos estos motivos, han empezado a aparecer organizaciones en defensa de los derechos de los intersexuales como la OII (Organización Internacional de Intersexuales) o la ISNA (Intersex Society of North America). Estos organismos reivindican que en ningún caso sea el médico quien decida la identidad sexual que ha de tener un bebé intersexual: defienden que sea el mismo individuo quien decida en qué género se quiere clasificar y si quiere o no, someterse a la cirugía.
Pero, mientras este bebé intersexual se hace lo suficientemente mayor como para decidir por sí mismo, ¿cómo se le educa, como hombre o como mujer?. La ISNA es partidaria de dar siempre un género al bebé, independientemente de su genitalidad, y permitir que se pueda modificar el género más adelante, cuando el niño tenga edad para decidir. Opinan pues, que es mejor clasificarlo, ya sea como mujer o como hombre, porque si se registra como "neutro" siempre será considerado raro o extraño. Para decidir el género con el que se clasificará el bebé, la ISNA recomienda basarse en tests hormonales y genéticos, además de tener en cuenta la opinión del médico que, por su experiencia, puede tener más facilidad para "acertar" con cuál de los dos sexos puede sentirse más cómodo al bebé.
Así que teniendo en cuenta todos estos datos, es más que probable que en los próximos años muchos países imiten la iniciativa de Alemania o Australia en cuanto a la clasificación de género y contemplen la posibilidad de un tercer sexo mientras el individuo intersexual se define -bueno, si gobierna el PP evidentemente esto no ocurrirá, pero eso es otra historia que hoy no toca -.
Hay estudios biológicos que demuestran que la mitad de las especies que habitan la tierra, ya sean animales o vegetales, no se pueden clasificar como macho o como hembra, bien porque son hermafroditas -como la mayoría de las plantas- o bien porque a lo largo de su vida empiezan siendo machos y acaban siendo hembras o viceversa -como ocurre con los caracoles, las estrellas de mar y muchos peces - . Hasta aquí nada que decir.
Ahora bien, resulta que este mismo año, países como Australia y Alemania han reconocido el género neutro. Y esto qué quiere decir?. Pues significa que dejan abierta la posibilidad de que un ciudadano no tenga que registrarse como mujer o como hombre sino que puede dejar vacía la casilla correspondiente al sexo. Y, os preguntaréis, porqué, que no estaba suficientemente claro que un ser humano tenía que ser hombre o mujer?. Pues resulta que este modelo binario se está empezando a cuestionar porque hay muchos casos de bebés que nacen con características fisiológicas de ambos sexos, de manera que los casos de hermafroditismo, androgínia o de individuos intersexuales no se pueden considerar casos aislados - la estadística señala un caso por cada 250 personas o lo que es lo mismo, tienes las mismas posibilidades de coincidir con un intersexual que con un pelirrojo-. Pensad también que en EEUU se realizan diariamente 5 operaciones quirúrgicas de asignación de sexo en bebés.
Hasta ahora, el recién nacido debía inscribirse como niño o como niña en el registro y lo más habitual era que fuese el equipo médico quien decidía cuál sería el sexo definitivo del bebé, priorizando los órganos sexuales más desarrollados o visibles y extirpando los de tamaño menor. Pero esta decisión no siempre era la acertada porque el hecho de intervenir a un bebé a los pocos días de nacer, pone en peligro su salud y existe el riesgo de dañar sus genitales y disminuir su sensibilidad. Y no sólo eso. Muchas personas intersexuales podían quedar atrapadas en un género que luego, al hacerse mayores, no sentían como suyo.
Por todos estos motivos, han empezado a aparecer organizaciones en defensa de los derechos de los intersexuales como la OII (Organización Internacional de Intersexuales) o la ISNA (Intersex Society of North America). Estos organismos reivindican que en ningún caso sea el médico quien decida la identidad sexual que ha de tener un bebé intersexual: defienden que sea el mismo individuo quien decida en qué género se quiere clasificar y si quiere o no, someterse a la cirugía.
Pero, mientras este bebé intersexual se hace lo suficientemente mayor como para decidir por sí mismo, ¿cómo se le educa, como hombre o como mujer?. La ISNA es partidaria de dar siempre un género al bebé, independientemente de su genitalidad, y permitir que se pueda modificar el género más adelante, cuando el niño tenga edad para decidir. Opinan pues, que es mejor clasificarlo, ya sea como mujer o como hombre, porque si se registra como "neutro" siempre será considerado raro o extraño. Para decidir el género con el que se clasificará el bebé, la ISNA recomienda basarse en tests hormonales y genéticos, además de tener en cuenta la opinión del médico que, por su experiencia, puede tener más facilidad para "acertar" con cuál de los dos sexos puede sentirse más cómodo al bebé.
Así que teniendo en cuenta todos estos datos, es más que probable que en los próximos años muchos países imiten la iniciativa de Alemania o Australia en cuanto a la clasificación de género y contemplen la posibilidad de un tercer sexo mientras el individuo intersexual se define -bueno, si gobierna el PP evidentemente esto no ocurrirá, pero eso es otra historia que hoy no toca -.
(Pots consultar l´article d´aquesta notícia aquí)
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